mardi 27 mars 2018

Señor, hoy me has pedido que escriba.

He abierto mis manos para recibir tu presencia y me pediste que escriba, que cuente, que hable de la vulnerabilidad y del amor. Que escriba sobre la fuerza que se esconde tras el dolor, que hable del dolor que veo y de como la fuerza de amor puede lograrlo todo, todo.

Aucun commentaire:

Enregistrer un commentaire